¿Sabes cómo mantener tus lentes contacto para que estén en perfectas condiciones el mayor tiempo posible?
¡En Óptica Climent te enseñamos a hacerlo!
La parte más importante es la higiene, y nuestro primer paso debe ser SIEMPRE lavar bien las manos con jabón antes de manipular las lentillas.
Comprobaremos que la lente de contacto esté en la posición adecuada, recordar que tiene derecho y revés. Si colocamos la lentilla del revés podría dar leves molestias, y aumenta el riesgo de que pueda doblarse o que la lente «salte» del ojo.
Observaremos el borde de la lente y si la forma está hacia arriba (como un bol de fruta), la lente estará en la posición adecuada. Si los bordes no están hacia arriba, o vemos que tiene una forma «rara», posiblemente la lente esté del revés. Simplemente dale la vuelta y verás como vuelve a tener la forma adecuada.
Muchos usuarios tienen diferente graduación en ambos ojos, por tanto, es muy importante identificar adecuadamente DERECHO e IZQUIERDO en el portalentes. De este modo evitaremos posibles infecciones en caso de que uno de los ojos se infecte. En esos casos, lo mejor es desecharlas e interrumpir el uso de lentes de contacto hasta que ambos ojos estén sanos de nuevo.
El último paso, y no por ello el menos importante, será la limpieza de las lentes que, al final del día, están sucias, (aunque no lo veamos a simple vista), debido a la contaminación ambiental, el polvo, la grasa de la lágrima… que quedan adheridas a la lente, por tanto, la limpieza es fundamental.
Los líquidos de mantenimiento, nos ayudan a conservar nuestras lentes de contacto en las mejores condiciones para un porte sano durante todo el reemplazo (quincenal, mensual, trimestral, semestral o anual).
Consulta a tu óptico-optometrista sobre el mejor método de limpieza para tus lentes de contacto.
Cómo mantener tus lentes contacto limpias

13
Abr